El tormento de la noche
desgrana cada paso
con su poderosa obscuridad.
Y diluye cada trozo del ser,
Y diluye cada trozo del ser,
destrozándolo,
difuminándolo y arrojando cada uno
de sus largos hilos de arena blanca
recuerdo de tu rostro.
recuerdo de tu rostro.
De frescura de vitalidad
que desprecia con vehemencia cada vaivén de las horas
que desprecia con vehemencia cada vaivén de las horas
provocado por esta enfermedad del alma
que acabará consumiendo
cada una de las mitades.